Hay que apartarse del mal conocido, seguir proponiendo una unidad integrada por los socios del régimen nos convierte en colaboradores, nada de esa unidad. Hay que marcar distancia, hay que buscar recursos para organizar tienda aparte.
Es tan grave participar de este circo como grave es no decidirse hacer lo pertinente; organizar un movimiento con el 80% de descontento y montarse en la solución. Hay que montarse con la diáspora verdadera, hay que gerenciar la crisis y viabilizar la verdad.
Hay que montarse en pedir ayuda, recursos para organizar con pueblo, no para robar como han hecho las dos asociaciones de delincuentes.
Hasta cuando discutir sobre unas dudosas primarias con el ropaje de la traición.
Hay que plantear por todo el cañón las irrenunciables condiciones. A quien se le ocurre retomar el “como sea ganamos”. Nos han puesto un cebo, nos estamos entrampando.
Ninguna de las dos asociaciones tienen un candidato de buena fe, ni capacidad para ser el presidente necesario.
Dicen en mi tierra "mejor solo que mal acompañado".
Edgar Luzardo
